Tuesday, June 5, 2012

La imagen de la PNP


La imagen de la Policía Nacional, en un país donde los estándares de violencia, en todas sus formas, está en constante y al parecer inalterable crecimiento, y donde existen sectores de la población, en todo el territorio de la república (Costa, Sierra y Selva) sumidos en la convulsión social, por diferentes motivos, muchos de ellos injustificados y, porque no decirlo, alentados por una permanente inacción por parte del Estado, durante las administraciones pasadas. Al margen de los hechos aislados de corrupción que lamentablemente subsisten y, me temo, subsistirán como un mal endémico que igualmente corroen los cimientos de muchos sectores de la administración pública. Siempre será el centro de atención noticiosa, mordaz y no menos severa opinión en torno a su accionar y critica pocas veces constructivas, por parte de la población en su conjunto. En consecuencia, para que esta corriente de opinión, muchas veces adversa, se revierta en favor de la policía, se debe de actuar con energía, decisión e inmediatez, empezándose por las Comisarias, consideradas células básicas de la sociedad, obviamente, en materia de seguridad preventiva y, fundamentalmente, como ente generador de valores hacia la niñez y juventud en sus respectivas jurisdicciones. Porque no pensar, por ejemplo, en tener una presencia directa y permanente en el tiempo, no solo como garantía de seguridad dentro y fuera de estos centros de enseñanza, sino como promotor de Valores, a través de conferencias interactivas dirigidas a la población estudiantil y sus familiares, poniendo especial énfasis, en los alumnos de familias disociadas. Tenemos que evitar la aparición de futuros ¨Gringachos¨. De esta manera, estaríamos ejercitando una labor eminentemente preventiva en favor de la sociedad, a quienes nos debemos.
No es necesario realizar un censo policial de la zona, para poder identificar dentro del barrio, donde se presta servicios, a las familias carentes de valores, y proclives, claro está, al delito. Trabajemos en dicho tema, con mucho tino, ahínco y perseverancia. De esta manera, estoy seguro nos ganaremos a la Comunidad. Hay que multiplicar y difundir convenientemente, las buenas acciones de nuestros agentes policiales, que dicho sea de paso, no son pocas. Por ejemplo, cuando por las circunstancias extremas, socorriendo oportunamente a una madre gestante, se hacen las veces de obstetras, trayendo al mundo a criaturas saludables. Cuando se devuelve sumas importantes de dinero o joyas, olvidadas por sus propietarios o hechos de heroicidad a propósito de los acontecimientos acaecidos en el VRAE, entre otras. Y por el contrario, decretarse ¨Tolerancia Cero¨, a hechos que dañan profundamente, la imagen de la Institución, como los engorrosos sucesos que lamentablemente fueron propalados por los medios de comunicación, justamente al interior de las Comisarias, cuando agentes policiales, claramente identificados, golpeaban, por no decir, torturaban, causándole la muerte, a una persona civil intervenida y,  en otro hecho, no menos lamentable, cuando una pareja de jóvenes intervenidos, en aparente estado de ebriedad, propinaban golpes a los propios custodios de la ley (agentes policiales), siendo increíblemente denunciados estos últimos, por incumplimiento de funciones.
Frente a esta realidad, es preciso e impostergable, que nos identifiquemos con los valores institucionales, que luchemos verdaderamente y sin hipocresías, ni espíritus de cuerpo, mal concebidos, contra la Corrupción, denunciando estas nocivas acciones, que se detecten al interior del instituto. Para poner en práctica estas acciones, no considero necesario la creación de una Oficina de Control Interno, como existe en otras instituciones afines, basta y sobra, con la Inspectoría General descentralizada. Seamos capaces de cambiar de actitud, pongamos en práctica la decencia en todos los actos de nuestra vida, y, por último, logremos ser catalogados por propios y extraños, como personas dignas  y honorables. De cada uno de nosotros depende el prestigio de nuestra institución.  
¨Digno, no es la persona que pide lo que se merece, ni acepta lo inmerecido¨ 
¨La felicidad, no consiste en hacer lo que se quiera, sino, querer lo que se hace¨. Hasta la próxima.      
Julio Andaluz

2 comments:

  1. Comparto la reflexión coontenida en la nota escrita por Julio Andaluz.
    Lo invito a pronunciarse también, sobre esta interrogante: ¿Qué otros aspectos debe preocuparnos sobre la imágen de la PNP?...¿y el triste papel que le está dando este gobierno a la Policía Nacional?, convirtiéndolo en ejército de ocupación en las zonas de protesta contra la minería, cuyos mandos permitien u ordenan la cobarde brutalidad y violencia contra los canpesinos de Cajamarca?..o el papel de los Jefes de la PNP que convierten en Comisaría instalaciones de las mineras?..o el papel que desempeñaron los mandos de la Policía subordinados al CCFA en la fallida "operación Libertad"...que ocasionó la inútil pérdida de vidas de jóvenes policias de la DINOES?...

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  2. Me parece que este Gobierno ni los anteriores ni los que vendran tienen ni tendran la culpa delaprobio ,vilipendio, degradacion de la cual es objeto la Institucion de la Policia Nacional del Peru,creo yo que la culpa es de los que permiten ser tratados de esa manera, y cuya responsabilidad de ello recae en sus integrantes y los que los comandan, estos ultimos ,por apetitos personales de un grado jearquico y/o cargo expectante, no escatiman en dar la espalda a su Alma Mater y compañeros de armas, convirtiendose en unos "CHICHEÑO" serviles y genuflexos,de lo cual la Clase politica de turno en el poder, conocedora de estas debilidades de algunos , saca provecho al maximo para utilizarlos acorde a sus intereses y conveniencias

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